El sábado 1 de junio de 2019 a las 21:00 tendrá lugar el evento deportivo más importante de Europa, la Final de la UEFA Champions League, entre El Tottenham y el Liverpool, y la ciudad elegida es Madrid, en el estadio Wanda Metropolitano. La capital se llenará de aficionados ingleses, se calcula que llegarán unos 80.000, aunque muchos no han conseguido entrada para el partido. Por lo tanto, gracias al trabajo de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado (Policía Nacional, Policía Municipal y Guardia Civil) y de las empresas de seguridad que trabajan en instalaciones como centros comerciales, comercios, hoteles y recintos deportivos, todo lo que suceda antes, durante y después de la gran final podrá desarrollarse con total normalidad.

El dispositivo de seguridad lo formarán 4.700 efectivos, se empleará un dron y una medida excepcional que consiste en la prohibición de vender alcohol a partir de las 17:00 del sábado en las zonas donde se agruparán los aficionados. También se han instalado las «fan zone», la del Liverpool en la Plaza de Felipe II y la del Tottenham en la Plaza de Colón, ambas fuertemente vigiladas. En los accesos al campo habrá 3 anillos de seguridad, donde se registrará que los aficionados llevan entrada, así como sus mochilas y pertenencias. La ocupación hotelera en Madrid llegará casi al 100%.

Por lo tanto Madrid se blindará ante el mayor espectáculo deportivo del año, y gracias a estas medidas y a los recursos destinados (que incluyen también el uso de las tecnologías más avanzadas), dará ejemplo a nivel mundial de deportividad y de seguridad para este tipo de eventos.